El Tarot Victoria Regina es creación de la artista Sarah Ovenall, diseñador gráfico y artista de collages. Este Tarot, de hecho, está hecho a partir de collages de revistas, periódicos y libros ingleses del siglo XIX. A mi parecer, es uno de los más bellos del mundo. Convierte a la baraja no sólo en un documento histórico, pues muchas de las cartas cortesanas y los arcanos mayores son figuras históricas de la época, sino en una obra de arte contemporánea. Esta es una baraja un poco heterodoxa: las espadas han sido cambiadas por pistolas o rifles (las espadas de nuestro tiempo); las copas son jarras industriales de vidrio (Mason jars); las varas son pluma fuentes; y los oros o pentáculos son relojes de bolsillo (el tiempo es dinero, según la idiosincrasia inglesa victoriana).

“La era victoriana fue un tiempo de gran inventiva, sin embargo se aferraba fuertemente a las tradiciones del pasado. La gente viajaba por trenes y barcos a vapor. Las ciudades eran iluminadas con gas, y luego luz eléctrica. Pero aún sin considerar cuestiones de pobreza, de aquellos dejados a un lado por el progreso, siempre hubo cosas viejas existiendo con las nuevas. Los cirios no dejaron de existir cuando la luz a gas estuvo disponible en casa. Mientras que algunos querían las nuevas modas producidas en masa, otros buscaron a diseñadores como William Morris. El Movimiento Art and Crafts del siglo XIX en Inglaterra y en Estados Unidos explícitamente igualaron lo nuevo y lo moderno con el tejido regenerado y lo feo y lo gastado para volver a la gracia y el estilo de tiempos anteriores. Al mismo tiempo, Morris fue influido por Karl Marx y los socialistas y comprendieron la importancia del hecho de que muchos no eran capaces (y fueron históricamente incapacitados) de adquirir cosas bellas.

Los relojes que vemos en el Dos de Oros pueden mostrar la misma hora, o pueden tener doce horas de diferencia. ¿Estamos tratando de balancear opuestos, o estamos fallando en ver las conexiones? Así como los victorianos procuraron satisfacer su fascinación por lo nuevo con un presto a la tradición, nos encontramos con frecuencia enfrentados con fuerzas que parecen estar empujándonos en direcciones opuestas. Es un balance delicado que debemos mantener. Una de las lecciones que podemos aprender de esta carta es que debemos tomar un papel activo en la vida. No podemos permanecer pasivos y esperar que todo funcione. La meta es comprender nuestras opciones y actuar. Si hay conflictos, debemos procurar entenderlos y resolverlos. Si olvidamos las lecciones que hemos aprendido en el pasado, no seremos capaces de comprender qué pasará en el futuro. Si nos aferramos con demasía a lo que es seguro, nos estancaremos y no lograremos ningún progreso en nuestro trabajo.”

Extracto del libro que viene con la baraja.